Sociedad N.N.

"La poesía no tiene precio o a lo mejor no vale nada"

Son los poetas que jamás presentarías a tus padres, ni los que llamarías para que te auxilien un sábado por la noche. Algunos tienen cara de locos, otros de fumones y otros de violadores. En este caso no hay que guiarnos ni de la escueta biografía, ni de su desaliño. No son los mimaditos por la noche limeña, ni los borrachosos que se la pasan en Quilca hablando del viejo Buko. Ni los que publican sus poemitas bajo sellos independientes de sus amigotes, otros poetas, y que frecuentan recitales que son para poetas y que leen poemas que son para más poetas.... (bis)

¿Entonces qué son?

Ellos parecen buscar -o lanzar a fuera de sus cubículos- una boya de malditismo. Ya no son muchachos. Autóctonos de Cerro de Pasco. Aseguran "simplemente escribir de lo que nos da la gana para nosotros y para nadie al mismo tiempo"
Son 4, al inicio eran 5. 
Responden al nombre de Sociedad N.N.   y por dos cervezas te leen sus poemas gratis. Antologados en un libro con el mismo nombre, publicado por la editorial La Guerra Florida,  muestran al mundo sus primeros poemarios: 

Manuel Alanya:Río de Piedras Lajas

Bruno Colqui: Por habito más que por halito

Giancarlo Morales: Fosa Común

Luis Puris: Lisergicos

En tiempos donde la creación poética peruana y mundial sufre los golpes de la pose, por culpa de iconoclastas insípidos, de rebeldes del facebook, vale sacar a la luz algunos poemas -por qué son poetas, claro, de poemas- que cubren con colchas, sudor y mierda la destrucción actual.

Algunos probando el abrazo de las drogas y escribiendo con a cuajos, otros en pedacitos experimentales, todos aunados por la sensación de la soledad, vacío. Pero no hay nada peor que hablar de la poesía un sabado por la noche, con el sudor en los sobacos y la cercanía de una tocada al sur de la ciudad... la poesía hay que sentirla. Y meterla.

 Aquí dejo algunos poemas para se les haga agua a la boca o se mojen los pantalones. 

Da igual:

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Quédate
–esta noche –
no haré ruido –lo juro –
caminaremos 2 Km. completos,
hasta entender nuestros silencios
hasta aquietar –nuestros miedos –
Te llevaré de la mano
a las orillas del Junín
y aún sin hablarte te besaré
como tiempo atrás,
y no esperaré que respondas
porque a veces hablar está de más.
Correremos por las orillas
–bello y majestuoso lago –
dejaremos que la ciénaga nos quite
los zapatos –fango de antiguos dioses –
y seguiremos corriendo
con las calcetas mojadas
hasta encontrarnos más cerca
del oscuro cristalino nocturno
de las aguas que vibran al son del viento.
Me dormí temprano –como a las diez –
y desperté a dos metros de ti
–estabas mirando el Junín –
Me tomé la cabeza que estaba estallándome
y miré contigo el cuasi infinito
contenido de aguas
y nos besamos contemplando por quinta vez
el Junín.

De Luis Puris

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te oigo cantar
desde el tardío
hasta todo el empuje del tiempo,
eh! escuche estas notas
por dobles que sean,
son lamentos del padre nuestro,
son pasivos, son raspantes,
son algún día de abril, bisiesto,
o en lunada sonrisa
de mayo.

te oigo raspar
el delgado muslo de esta caja,
el notorio táctil deformado
o la deforme hinchazón de tu tacto,
por dobles que parezcan,

eh! escuche este huayno señor

De Bruno Colqui

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Yo también
Quiero ser adoptado
Por cualquier
Mes no festivo,
Por cualquier
Cráter de cartón,

En ese pequeño rincón
Donde descansan
Los adornos verdes
Y la nieve falsa de algodón,

Dices tú
Que me escondo,
Que le temo a los abrazos,
Digo yo
Que
Los
Pinos
No
Apagan
La oscuridad.

De: Manuel Alanya
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La sensación
increíble
de
sentirse
un trozo
de
pavimento
la sensación
increíble
del caucho
negro
y sucio
sobre el cuerpo
la sensación
de que soy
una vena
hueca profunda
y apestosa
un dedo deslizándose
sobre la superficie
de mis órganos
llevándose
la puntita del dedo hacía la
boca que
luego deja
escapar una sonrisa…
mi sabor, ¿qué sabor?...
De Giancarlo Morales

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Te amo!
como cuando tú eras la flor
y yo
el colibrí que moría por tu néctar,
te amo! desde ese tiempo

inmemorable
en el que éramos
células simples
moviéndonos entre las aguas.
Así será después el Karma
tú serás el helecho
y yo la roca ígnea,
y cruzaremos el tiempo
hasta sus confines
siempre prendidos
el uno del otro,

así algún mago vudú

trenzó nuestros destinos.

Por Luis Puris

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(Para los que no puedan encontrar su libro -es una edición bien caleta y de seguro, sólo buceando en las rumas de Quilca y alrededor o tal vez pidiéndole a algún enterado, podrás conseguirlo.... En fin, pueden seguirlos, verlos, toparlos en la siguiente dirección: http://especienn.blogspot.com/2007/04/sociedad-nn.html )


 Por Julio Barco